Paramahansa Yogananda
Nació el 5 de enero de 1893, en Gorakhpur, India. Su nombre de familia era Mukunda Lal Ghosh. Sus padres eran discípulos de Lahiri Mahasaya. Este gran Maestro fue el instrumento por el que el Kriya Yoga se reintrodujo en la India moderna.
Mukunda (Paramahansa Yogananda) buscó a muchos de los sabios y santos de la India, con la esperanza de encontrar un maestro iluminado que le guiara en su búsqueda espiritual. Fue en 1910, a la edad de diecisiete años, cuando conoció y se hizo discípulo del venerado Swami Sri Yukteswar Giri.
Sri Yukteswar le dijo al joven discípulo que había sido elegido para difundir la antigua ciencia del Kriya Yoga en América y en todo el mundo .
Después de graduarse en la Universidad de Calcuta en 1915, Mukunda (Paramahansa Yogananda) tomó los votos como monje de la venerable Orden monástica de los swamis, momento en el cual recibió el nombre de Yogananda (que significa felicidad, ananda, a través de la unión divina, yoga).
Paramahansa Yogananda comenzó la obra de su vida con la fundación, en 1917, de una escuela para chicos basada en el “arte de vivir”, donde los métodos educativos modernos se combinaban con la formación e instrucción del yoga en los ideales espirituales.
Un día de 1920, mientras meditaba en la escuela de Ranchi, Yogananda tuvo una visión divina, en la que se le mostraba que había llegado el momento de comenzar su trabajo en Occidente. De inmediato partió hacia Calcuta, donde al día siguiente fue invitado a participar como delegado de la India en un congreso internacional de líderes religiosos que se celebraría ese mismo año en Boston.
El joven Swami llegó a Boston en septiembre de 1920. Su primer discurso, impartido en el Congreso Internacional de Religiosos Liberales, trataba sobre “La Ciencia de la Religión”, y fue recibido con gran entusiasmo. Ese mismo año fundó Self-Realization Fellowship para difundir en todo el mundo sus enseñanzas sobre la antigua ciencia de la India y la filosofía del Yoga.
Durante los siguientes próximos años, dio clases y conferencias en la Costa Este de Estados Unidos; y en 1924 se embarcó en una gira por todo el país. Llegó a Los Ángeles a principios de 1925, donde estableció la sede internacional de Self-Realization Fellowship en la cima de Mount Washington, la cual se convirtió en el centro espiritual y administrativo de su creciente obra.
De 1924 a 1935, Yogananda viajó extensamente y dio multitud de conferencias, hablando ante audiencias que colmaron muchos de los más grandes auditorios de América.
Yogananda hacía hincapié en la unidad subyacente a todas las grandes religiones del mundo, y enseñaba métodos de aplicación universal para la consecución de una experiencia directa y personal de Dios. A los estudiantes más interesados en sus enseñanzas les impartió las técnicas del Kriya Yoga, para el despertar del alma, iniciando a más de 100.000 hombres y mujeres durante sus treinta años en Occidente.
En 1935, Paramahansa Yogananda regresó a la India para una hacer una última visita a su gran gurú. Sri Yukteswar que falleció el 9 de marzo de 1936.
Durante el año que duró la estancia de Yogananda en su tierra natal, dio clases y la iniciación en Kriya Yoga en ciudades de todo el subcontinente indio. También mantuvo encuentros con Mahatma Gandhi, quien solicitó la iniciación en Kriya Yoga; con el Premio Nobel de física Sir CV Raman, y con algunas de las más renombradas figuras espirituales de la India, incluyendo a Ramana Maharshi y Anandamoyi Ma.
Fue durante este año cuando Sri Yukteswar le otorgó el título espiritual más elevado de la India, “Paramahansa”. Literalmente “Cisne supremo” (símbolo del discernimiento espiritual), este título se otorga a quien se halla establecido en el máximo estado de unión con Dios.
Mientras estaba en la India, Paramahansa Yogananda aseguró las bases permanentes para su obra allí, Yogoda Satsanga Society of India. Desde su sede central en Dakshineswar (en la rivera del Ganges cerca de Calcuta) y el ashram original en Ranchi, la sociedad sigue creciendo hasta hoy -con las escuelas, ashrams, centros de meditación, y las obras de caridad en todo el subcontinente.
A finales de 1936 regresó a Estados Unidos, donde permaneció el resto de su vida.
Otras obras importantes de Paramahansa Yogananda
Entre los más de veinte de libros de Yogananda publicados destacan los tres siguientes. Los dos primeros, los más extensos de todos los publicados, son sistemáticos, con minuciosas explicaciones técnicas, y por ello constituyen auténticos libros de texto sobre yoga. El segundo es el más extenso de todos sus libros. El tercero es un resumen del segundo, pero con especial enfoque en Jesús y la Biblia. Los tres contienen algunas innovadoras explicaciones o interpretaciones sobre las interacciones entre cuerpo, mente y alma.
El Bhagavad-gītā, traducción del clásico hindú, acerca del raya yoga, 1173 páginas, 1995.
La segunda venida del Cristo, entendida como la consciencia crística en el interior de cada ser humano, 1742 páginas, 2004.
El yoga de Jesús, con nuevas interpretaciones de la Biblia desde el punto de vista del yoga, 147 páginas, 2007.
La Busqueda Eterna: Como percibir a Dios en la vida diaria, charlas y ensayos, 567 páginas, 2002.
The Divine Romance, 468 páginas, 1986.
Vive Sin Miedo: despierta la fuerza interior de tu alma, 79 páginas, 2005.
Meditaciones Metafísicas: oraciones, afirmaciones y visualizaciones universales, 175 páginas, 1998.
Donde Brilla La Luz: sabiduría e inspiración para afrontar los desafíos de la vida, 261 páginas, 2000.
Como Conversar con Dios. 56 páginas, 2000.